"Un Rey que de corona de cuernos ha despertado con el eco de un norte que no le ha olvidado"

Llegó hace apenas un par de días, medio moribundo, decía ser un arqueólogo de la Liga de Expedicionarios, que se encontraba con su equipo en unos pasajes subterráneos al sur de las Colinas Pardas. Allí encontraron pasillos y cámaras inmesas repletas de gigantes de piedra, cientos de Vrykuls petrificados y un artefacto extraño que decidieron llevarse. 

Pero al salir de allí fueron emboscados por un númeroso grupo de trols drakkari, que parecían estar esperándoles. Lo último que dijo que recordaba es que consiguió escapar, mientras sus amigos eran torturados y asesinados, y así llego hasta Valgarde, donde tras contar lo sucedido murió. 

Por aquellos entonces no le hicimos mucho caso, el norte esta lleno de charlatanes buscando embaucar a los credulos con historias de tesoros y demás patrañas, pero ayer y tras el ataque de un grupo disperso de Vrykuls, no puedo evitar recordar lo que me dijo uno de ellos al atraparle; 

"Un Rey que de corona de cuernos ha despertado con el eco de un norte que no le ha olvidado"